TRATAMIENTOS FARMACOLÓGICOS Y FISIOTERAPIA
En la Residencia Virgen del Carmen sabemos que tanto el tratamiento farmacológico como la fisioterapia tienen un papel fundamental en la salud de la población geriátrica, y tenemos en cuenta cómo ambas terapias pueden interactuar y complementarse, especialmente cuando nos encontramos ante enfermedades crónicas y condiciones degenerativas.
Es frecuente que esta población presente comorbilidades que requieren una atención integral, por lo que se suelen emplear medicamentos para aliviar los síntomas y mejorar su calidad de vida. Sin embargo, el uso de ciertos fármacos puede producir efectos adversos, afectando a la capacidad de la persona para participar debidamente en la sesión de fisioterapia.
Por ejemplo, existen fármacos que se pueden considerar facilitadores, ya que, al reducir el dolor, la participación y el progreso en la rehabilitación se ven potenciados. Sin embargo, otros fármacos pueden causar somnolencia o confusión y suponer un riesgo durante las sesiones de fisioterapia. Por ello, trabajamos de forma multidisciplinar, lo que nos permite ajustar los tratamientos de los residentes para poder así adaptar cada una de las intervenciones.
Por otro lado, otro factor a tener en cuenta es la polifarmacia, muy común en la población geriátrica, que puede dificultar el adecuado cumplimiento del tratamiento farmacológico e influir a su vez en la rehabilitación. Por tanto, es esencial que todo el equipo trabaje en conjunto, tanto en la correcta gestión de la medicación como en la continua coordinación del personal con el fin de que el plan de tratamiento integral sea capaz de potenciar al máximo los beneficios de todas las terapias.
En conclusión, el tratamiento farmacológico influye de forma significativa sobre el tratamiento fisioterapéutico en la población geriátrica y la colaboración de los profesionales sanitarios puede mejorar la eficacia de ambos tratamientos, potenciando la calidad de vida de este grupo poblacional.